martes, 19 de octubre de 2010 | | By: ralopin

RECURSOS E.F. CONSEJOS PARA ELABORAR VUESTRO PROPIO TEMARIO DE E.F.

Estos consejos son una síntesis de las recomendaciones de varias editoriales especializadas en la preparación de oposiciones. Espero que os puedan valer.

Directrices básicas en la elaboración del temario de la especialidad.

Hay un conjunto de directrices o normas básicas que debemos tener muy en cuenta a la hora de desarrollar cualquiera de los temas de la especialidad, cumpliendo siempre con los siguientes puntos:

0. Esquema Inicial
1. Introducción
2. Desarrollo
3. Conclusión
4. Bibliografía

0. El esquema inicial

En primer lugar, y antes de comenzar con la introducción del tema, es importante exponer un esquema del mismo, citando únicamente los epígrafes de los apartados y subapartados más relevantes.

¡Muy importante!

Durante la elaboración del tema específico es fundamental desarrollar cada uno de los apartados básicos que dicta el título del tema. En caso contrario, podríamos darnos por suspensos, al estar nuestro examen incompleto.

1. La introducción

Una buena introducción es fundamental en la elaboración del cualquier tema, y en ella tendremos que:

- Justificar la importancia del tema para la vida del alumno y en relación también con otras experiencias curriculares del área.

- Tratar de contextualizar el tema en el currículo vigente, y con documentos como el Proyecto Educativo del Centro (PEC) y el Proyecto Curricular del Centro (PCC), además de citar la relación con los temas ó ejes transversales (por ejemplo, la Educación para la Salud, Coeducación, Educación Ambiental,…). ¡Simplemente mencionando dicha relación, sin necesidad de profundizar en ello!

- Introducir brevemente el tema refiriéndonos a los puntos y apartados básicos del tema.

2. El desarrollo del tema

Respecto al desarrollo del tema, debemos tener en cuenta lo siguiente:

- Respetar el orden de los apartados básicos del título del tema, añadiendo si es necesario apartados relativos a definiciones, conceptos, características, etc. No obstante, en ocasiones sí que podremos cambiar el orden de los apartados básicos del tema, siempre que puede dicho planteamiento resultase más coherente.

- Es importante citar autores, puesto que refleja nuestro dominio de la materia.

- En apartados referentes a definiciones ó conceptos, también es aconsejable nombrar varios. Esto dependería, lógicamente, de la “coyuntura” que nos ofreciera el tema.

- Utilizar ejemplos, y siempre que podamos, refiriéndonos al contexto escolar.

- Relacionar, si es posible, con la realidad de la comunidad en que vayamos a realizar nuestro examen de oposición.

- El último apartado del desarrollo del tema vendrá representado por una aplicación didáctica del tema, o lo que es lo mismo, su tratamiento en el marco escolar. Tengamos muy presente que es precisamente en este punto donde podemos demostrar al tribunal nuestra capacidad y originalidad, pero con realismo, para ejercer la docencia.

Precisamente, muchos de los temas ya incluyen este apartado, a veces bajo diferentes denominaciones, como por ejemplo “Consideraciones didácticas….”, “Tratamiento educativo de…”, etc.

Ahora bien, si el tema concreto que vayamos a desarrollar no presenta un apartado de estas características en su título, es conveniente incluirlo como último apartado del desarrollo del tema.

3. La conclusión

En este punto:

- Es importante tener en cuenta que muchos opositores complican demasiado la parte final del tema, intentando hacerla demasiado extensa u original, cuando realmente una conclusión no debe ser más que una síntesis de las ideas básicas expuestas en cada apartado, redactándolo como una lista de conclusiones.

- También es aconsejable aportar opiniones propias que reflejen una reflexión personal sobre el tema e incluso sugerencias en forma de propuestas de mejora que pudieran surgir del contenido del tema.

4. La bibliografía

En cuanto a la bibliografía, como punto final del tema, debemos tener en cuenta lo siguiente:

- Citar la bibliografía del tema en la que nos hemos fundamentado.

- Citar la bibliografía referente a normativa educativa, siempre que el contenido del tema de pie a ello.

- No es conveniente nombrar los temarios como parte de la bibliografía, aunque sí puede resultar adecuado hacerlo bajo la correcta forma bibliográfica, es decir, nombrando el autor del tema concreto dentro del temario de la editorial correspondiente.

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